El perejil es una planta oriunda del Mediterráneo oriental europeo, utilizada ya por griegos y romanos como aromatizante de diferentes guisos.
El uso medicinal del perejil es viejo, como lo demuestra su presencia en la Capitulare de Villis vel Curtis Imperi, una orden emitida por Carlomagno que reclama a sus campos para que cultiven una serie de hierbas y condimentos incluyendo "petrosilinum" identificada actualmente como Petroselinum crispum.